Marcelo Lusardi, un joven de 18 años que sigue patinando tras perder repentinamente la visión por una enfermedad llamada neuropatía óptica de Léber. Este gallego nacido en Argentina venció la depresión, se armó de valor y bajó a la plaza con su skate y su bastón blanco para recuperar el equilibrio y poco a poco saltar escaleras y grindar bordillos.
Hace un año este joven de repente empezó a ver mal por un ojo, pero no le dio mucha importancia hasta que veía que esa mancha que le impedía ver no se iba, tras pasar unas semanas decidió ir al medico donde le dijeron que se le pasaría, pero no era así. Después de hacerle muchas pruebas y estar ingresado muchos meses le detectaron una enfermedad rara llamada Léber.
El veía lo suficiente para moverse, pero no podía ni ver la tele, ni jugar a la Play. Se metió en la ONCE y conoció a un par de personas ciegas, ahí se dio cuenta de que ser ciego te da otro punto de vista de la vida. Las personas a veces tenemos pequeños problemas y nos pensamos que es el fin del mundo pero, todo tiene solución en la vida aunque no puedas ver. Este chico patinaba, se quedo ciego y sigue patinando, puede que no lo haga tan bien como antes pero el lo hace, e intenta cada salto y cada truco. Lo importante es no darse por vencido decia.
Recuperado de: http://elpais.com/elpais/2016/11/26/tentaciones/1480154076_763255.html
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